La Tecnología de la Información es una herramienta poderosa que ha transformado positivamente nuestra forma de vivir y trabajar. Su importancia radica en su capacidad para mejorar la eficiencia, aumentar el acceso a la información y promover la conectividad global. Sin embargo, también es necesario reconocer sus desafíos y trabajar en soluciones para maximizar sus beneficios y mitigar sus riesgos.